Los datos que no conoces sobre la incontinencia urinaria de hombres y mujeres

Cada 14 de marzo se celebra en todo el mundo el día internacional de la incontinencia urinaria, un trastorno de nuestra salud que afecta a millones de hombres y mujeres en todo el mundo de forma silenciosa. Amiga, en este artículo queremos compartir algunos datos que seguro no conoces y además qué hacer si es tu caso, e inclusive si es el hombre el que la padece.

¿Qué es la incontinencia urinaria?

La incontinencia urinaria es la pérdida involuntaria de orina sin control del llenado y vaciado de la vejiga urinaria, acompañado, en ocasiones, de un fuerte deseo de orinar.

¿Cuáles son las causas de incontinencia urinaria?

Debes tener presente que la incontinencia urinaria es una patología que afecta tanto a hombres como a mujeres. Está muy relacionada con la edad —aunque no se trata de un estigma de personas mayores, de hecho muchas personas jóvenes pueden padecerla—, y es debida a múltiples causas. Es una patología que impacta de forma significativa en la calidad de vida de los pacientes.

La edad, embarazos y partos y obesidad, entre otras causas, pueden producir incontinencia urinaria en la mujer.

En los hombres la causa más frecuente es la incontinencia de esfuerzo como secuela tras una intervención quirúrgica.

Según el tipo de incontinencia, puede tener distintas causas:

• De esfuerzo, coincidiendo con actividad física, tos, estornudo o risa, que representa el 25% de los casos.
• De urgencia, se trata de una pérdida de orina asociada a un irrefrenable deseo de orinar, que representa el 20% de los casos.
• Mixta, en la que se asocian síntomas de las dos anteriores y que es el tipo más frecuente. Está producida por la edad, embarazos y partos, menopausia, deterioro funcional y cognitivo, y otros factores como intervenciones quirúrgicas, obesidad, ciertos tipos de ejercicios físicos, etc.

Los tipos de incontinencia urinaria son:

• Incontinencia urinaria continua o total, que es la pérdida constante de orina.
• Incontinencia urinaria de esfuerzo, en la que se produce la pérdida repentina de orina al realizar cualquier actividad que determina un aumento de la presión intraabdominal (ejercicio físico, tos, estornudos, etc.).
  
  Este tipo de incontinencia urinaria es la más frecuente en la mujer, especialmente en las que han tenido múltiples embarazos y partos vaginales y cuya vejiga, uretra o pared rectal sobresalen dentro de la vagina (prolapso pélvico). También puede presentarse en varones intervenidos de próstata.
  
  
• Urge-incontinencia que se caracteriza por el escape brusco de orina precedido por un intenso deseo para orinar. Suele estar producido por un aumento en la capacidad de contracción de la musculatura de la vejiga urinaria y puede estar relacionada con enfermedades y lesiones neurológicas.
  
  
• Incontinencia por rebosamiento o paradójica, que se produce en pacientes con procesos obstructivos en el tramo urinario inferior, que determinan una retención urinaria crónica (vaciamiento incompleto de la vejiga) pero que causa pérdidas involuntarias de orina.

¿Cómo puede atenderse la incontinencia urinaria?

Como lo hemos dicho siempre, no es normal que la orina se escape. La incontinencia tiene solución si se trata a tiempo.

No es normal que la orina se escape. Incluso cuando las pérdidas son muy leves o muy esporádicas es signo de que algo está fallando: ya es incontinencia. Si no se pone remedio, el problema irá empeorando con el paso del tiempo.

Por eso amiga, con la aparición de los primeros síntomas debes acudir con tu médico, quien determinará la solución más eficaz para cada paciente. El médico de cabecera, tu especialista o fisioterapeuta del suelo pélvico podrá evaluar tu problema y orientarte hacia la solución más factible para ti.

Estos son los posibles tratamientos que pueden aplicarse cuando existe incontinencia urinaria:

Tratamiento conservador

El primer escalón terapéutico lo constituyen las medidas higiénico-dietéticas, las técnicas de modificación de la conducta y la rehabilitación muscular del suelo pelviano o suelo pélvico.

¿De qué se ocupa el suelo pélvico?

Los músculos del piso pélvico brindan apoyo a los órganos que se encuentran en él:

• Apoyan el control de esfínteres: nos dan un control consciente sobre la vejiga y el intestino para que podamos controlar la liberación de orina, heces y flatulencias. Al relajar el suelo pélvico das paso a la orina y las heces.
• Apoyan la función sexual: En las mujeres, las contracciones voluntarias del suelo pélvico contribuyen a la sensación sexual y la excitación.
• Ayudan durante el embarazo: brindando apoyo al bebé y colaborando durante el proceso de parto. 
• Soportan nuestros órganos: trabajan con los músculos abdominales y de la espalda para estabilizar y apoyar la columna vertebral y darles sustento a todos los órganos de la pelvis y abdomen bajo. 

Un tratamiento conservador, muchas veces comienza con la recomendación de seguir una rutina de terapia física a través del entrenamiento de la vejiga y la práctica de los Ejercicios de Kegel. Los cuales de manera fácil te ayudan a ejercitar y fortalecer la musculatura del suelo pélvico, ayudando a prevenir la incontinencia urinaria o mejorar los escapes indeseados.

Desde TuSaludIntima de Zenzsual, te ayudamos a realizar los ejercicios de Kegel de forma correcta, con la guía rehabilitador del piso pélvico VagiYoga™, que te lleva de forma sencilla desde: cómo descubrir tu piso pélvico, cómo contraer, emitiendo un diagnóstico de la fuerza, y finalmente, te lleva por cuatro niveles de retos, para que de forma divertida, logres tonificar y rehabilitar toda la zona. El refuerzo positivo que se obtiene viendo cómo lo estás haciendo, hace una gran diferencia en cuanto al resultado y eficacia de los ejercicios.

Es una forma rápida de verificar si realmente estás contrayendo los músculos correctos, con la fuerza necesaria y llevando un registro de tu progreso, en la comodidad de tu casa. Si quieres prevenir la incontinencia o mejorar sus síntomas, busca VagiYoga hoy aquí.

Tratamiento farmacológico

Medicación indicada sobre todo en la incontinencia de urgencia y de esfuerzo.

Tratamiento quirúrgico

Cirugía mínimamente invasiva para pacientes en los que los tratamientos conservador y farmacológico no han surtido efecto.

Por su eficacia en cerca del 90% de los casos, destaca el procedimiento de colocación de malla transobturatriz transvaginal libre de tensión (TOT), que se inserta a través de una pequeña incisión vaginal. Es una cinta, habitualmente de polipropileno. Al ser porosa, se fija e integra en el organismo.

La operación dura unos 25 minutos y se realiza habitualmente bajo anestesia epidural, aunque también puede realizarse bajo anestesia local. Es una intervención sencilla y muy poco invasiva, lo que facilita la rápida recuperación de la paciente en su casa.

La incontinencia cesa al colocar la malla, si bien se recomienda evitar grandes esfuerzos durante el primer mes posterior a la intervención.

En ocasiones, existe prolapso de órganos pélvicos asociado, realizándose corrección laparoscópica o robótica (colposacropexia).

¿Puedo evitar llegar a una cirugía?

Puesto que la causa más frecuente de la aparición de las pérdidas de orina es el debilitamiento del suelo pélvico, su entrenamiento ha sido ampliamente estudiado y ha demostrado que mejora o soluciona más del 80% de los casos cuando la Incontinencia Urinaria es leve o moderada. Es por esto que en TuSaludIntima hemos creado a VagiYoga.

La realización de los Ejercicios de Kegel es muy eficaz y puede llegar incluso a solucionar la Incontinencia Urinaria en muchos casos, sin llegar a una cirugía, si es tratada a tiempo. Otro aspecto muy interesante a tener en cuenta, y que también se ha demostrado en diversos estudios científicos, es que la eficacia es mayor y la terapia es más resolutiva y se mantiene con el tiempo cuando el tratamiento está guiado y supervisado por tu médico o fisioterapeuta especializado.

En el caso de los hombres, compartimos algunos datos sobre la incontinencia urinaria que quizá desconoces…

1. La incontinencia urinaria afecta a 400 millones de personas en todo el mundo: si todas ellas decidieran juntarse en una región, sólo China e India la superarían en habitantes. Por ejemplo, en España hay 6,5 millones de afectados.
2. Uno de cada cuatro hombres mayor de 40 años sufre pérdidas de orina.
3. El 50% de los afectados por incontinencia descansa peor, ya que esta patología le obliga a levantarse por la noche para orinar. Un 45%, además, admite que interfiere en su vida sexual, mientras que un 20% refiere que el desempeño de su trabajo se ve perjudicado.
4. Un 60% de los hombres omite esta consulta cuando va al especialista. Más de un 50% espera un año para acudir a un profesional médico.
5. El 35% de los hombres no conoce la existencia de absorbentes masculinos y solo un 7% los usa. En su lugar, algunos recurren a compresas femeninas, papel higiénico o... doble calzoncillo.
6. El deterioro del esfínter, el músculo circular que controla el flujo de la orina hacia el exterior de la vejiga, provoca normalmente la incontinencia urinaria en hombres. Puede estar dañado por un aumento del tamaño de la próstata.
7. La andropausia, en la que suelen combinarse cambios hormonales e incremento de peso, debilita los tejidos del suelo pélvico. Ejercitar la musculatura de esta zona ayuda a controlar las pérdidas de orina. Los Kegel funcionan tanto para hombres como mujeres.
8. La incontinencia urinaria es la tercera enfermedad que causa mayor merma en la calidad de vida de los españoles, por detrás de las patologías mentales y los problemas cardiovasculares graves.
9. Una vejiga puede contener entre 300 y 400 ml de orina (unos dos vasos de agua) durante el día. Por la noche, la cifra aumenta hasta los 800 ml.
10. Existen tres tipos de incontinencia urinaria: de esfuerzo (los escapes son al reír, toser, estornudar o hacer ejercicio), de urgencia (la necesidad es tan intensa que no permite llegar a tiempo al baño) y mixta (combinación de las dos anteriores).
11. La incontinencia más frecuente entre los hombres es la llamada “vejiga hiperactiva”, producida por un mal control neurológico del vaciado de la vejiga. Sin embargo, es la patología que mejor solución tiene, gracias a la medicación controlada y al fortalecimiento del suelo pélvico.
12. A menudo, las pérdidas de orina se asocian a problemas como las enfermedades cardíacas, ansiedad, depresión, hipertensión arterial, obesidad, infecciones dermatológicas y del tracto urinario.

Además de la terapia física para rehabilitar el suelo pélvico, la recomendación médica puede incluir desde la prescripción de medicamentos, el uso de dispositivos especiales como los pesarios, implantes inyectables, hasta recurrir al esfínter artificial inflable, en caso de enfermedades neurológicas. También existe la electroestimulación, muy similar a la gimnasia pasiva. Y en última instancia, recurrir a algún tipo de procedimientos quirúrgicos o cirugía. 

Seas hombre o mujer, y más allá del tratamiento médico que pruebes, la incontinencia urinaria se asocia a cambios en el estado de ánimo. Por eso es importante, decidirse a buscar ayuda profesional con el personal médico oportunamente.

Nuestro objetivo en TuSaludIntima de Zenzsual es ayudarte a mantener tu salud general e íntima, y recordar la importancia de buscar ayuda médica. Además de eso contamos con un equipo de doctoras y profesionales disponibles para conversar contigo a través de sus consultas online cuando lo desees.

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